Fácil y abundante
Por Sergio Torres
Si esto es una película, quien la escribió tenía exceso de imaginación repentina que me da momentos realmente fantásticos. La vida es fácil y abundante. Otras veces la trama no avanza y todo se convierte en un rutinario salir y ponerse de sol, con algunas tareas intermedias que pueden incluir el trabajo, la pareja o su ausencia, los hijos, las mascotas, la familia, el construir una casa o alimentar un hogar. Cada situación es única, aunque el cerebro, gran ordenador del caos que nos rodea, insista en hacernos creer que todo es igual y esto lo socializamos al decir «Todos los hombres son iguales». «Todas las mujeres son iguales». Si alguna vez ha dicho alguna generalización, regrese un poco al presente: algo es diferente en esta ocasión. Si no es la primera vez, ya lo ha vivido, no igual que hoy, ahora sabe cosas, ahora es más sabio, ahora es más fuerte, ahora el mundo es más seguro, no porque realmente lo sea sino porque usted tiene más herramientas para saber que no todo lo que te reta es amenaza. Vive.