El parque
Por Jaime Chavira Ornelas
La banca permanece callada
vacía pero paciente, espera.
Las parejas pasan abrazadas
descubriendo sentimientos nuevos.
Los pájaros vuelan
indiferentes
las nubes observan las bancas.
Las hormigas suben y bajan por los arboles
con pedacitos de hoja en sus tenazas.
Los árboles bailan lentamente, están contentos
ven las nubes, rostros conocidos.
El aire apresura su paso, las bancas lo sienten y siguen calladas, vacías.
Las parejas pasan, se besan, se ríen.
El sol esta triste y se esconde
entre las nubes.
El piso de barro añora la lluvia, recuerda y suspira.
La estatua del héroe abatido sonríe.
El día pasa sin aviso, los automóviles resienten la fatiga de la jornada.
La noche llega y con ella el silencio
unos pájaros duermen
árboles y canteras respiran recuerdos.
El parque madura y sonríe
desea que mañana todo sea un sueño.
Jaime Chavira Ornelas es un sobreviviente de la desintegración familiar; estudió comunicación y manejo de negocios en el Colegio Comunitario de Maricopa en Phx. Az USA; tiene diplomados en exportación, importación y manejo de aranceles por Bancomext, también varios cursos de inteligencia emocional y lingüística. Trabajo para empresas a nivel gerencial. Actualmente es pensionado por el IMSS. Escribe cuentos cortos y poemas ácidos.
Muy buen pensamiento o recuerdo, pero muy triste y un parque desolado!
Felicitaciones Jaime…El relato es corto pero entretenido, rápido me llevó al Parque Lerdo cargado de buenos recuerdos queriendo revivir aquellos años donde sólo cabía la Felicidad!… Gracias Carnal.