Dintel de Almudena
4B. Algo no está bien… parte 2
Por Almudena Cosgaya
Silencio. Salió de la cama, tomó algunas prendas sin poner mucha atención y se pasó los dedos por el cabello, luego lo recogió en una coleta. Suspiró. La casa estaba sola e imaginó que su madrina habría salido temprano, por lo que se dirigió a la cocina, ignoró el mensaje sobre desayuno y abrió directamente el refrigerador. Tenía una sed inusual. Tomó una jarra con agua de flor de jamaica y empezó a beber del recipiente.
¿En verdad había bebido todo eso?
Miró el envase vacío. Aún tenía sed y también hambre, pero no quería comida, ni beber simple agua. Algo en su interior ansiaba algo distinto, pero qué.
Llegó a la escuela faltando diez minutos para la hora de entrada. Se preguntó si valdría la pena entrar, pero tampoco deseaba volver a la casa ni andar merodeando. Respiró profundamente. Un par de chicas pasaron por su lado y pudo percibir el perfume barato.
—¡Qué peste! —dijo Paola tapándose la nariz.
—¿Disculpa? —preguntó una de las chicas.
—¿En verdad no te has dado cuenta? Tu perfume huele a esos de los corrientes.
—¿Acaso no sabes con quién te estás metiendo? —dijo la chica a Paola mientras caminaba con paso firme hacia ella.
Paola era de las chicas que jamás decía algo, evitaba los problemas y las riñas. Pero ahora no entendía de donde llegaba esa confianza y esa valentía. Era emocionante y también atemorizante.
—No tengo tiempo para ustedes —dijo Paola entrando a la escuela. Algo crecía en su interior. Ya no tenía miedo.
Entró al salón y busco de inmediato a Erick. No había señales de él y se preocupó. Alguien la jalo del cabello.
—Vas a aprender que con nosotras nadie se mete —dijo una chica rubia, riendo.
—Billy… dale una elección a esta idiota —agrego una chica pelirroja mordiéndose el labio.
La respiración de Paola se entrecortó y comenzó a sentir que aquel calor volvía a recorrerle el cuerpo, que la ira volvía. Justo como el día anterior.
Sentía que dentro de poco tiempo no podría controlar su enojo, ni su fuerza. Billy la jalo con más fuerza y, como era de esperarse, ese jugador de futbol americano la hizo sentir una oleada de cólera.
Tenía que impedirlo antes de que fuera demasiado tarde.
Puso toda su fuerza de voluntad para detener esos sentimientos, pero las risas de las chicas y el insistente jaloneo fue la gota final.
Billy salió disparado, cayó a varios metros de distancia. Las chicas gritaron asustadas y la gente comenzó a llegar…
Continuará.
Almudena Cosgaya descubrió su gusto por las historias desde niña; hacía fanfics de relatos ajenos, lo cual fue para ella un excelente entrenamiento para escribir luego sus propios cuentos, al darse cuenta de que en algunos de sus relatos de fanfic había creado un personaje que merecía su propia historia. Es autora de poemas y de prosa narrativa. En 2017 publicó su novela La maldición del séptimo invierno.
Me encanta leerte amiga!!
Se me van como agua tus relatos Amiguita!!
Me dejas en “ascuas” jeje
Muy bien!! Esperare con ansia que llegue próximo Lunes!
Simplemente… GRACIAS! 👏👏👏👏👍🏻😍🥰🙌
Muy realista la historia me encantan tus historias
Orales, muy bueno. Me dejas en shok…. Muchas gracias por mi lectura.
Ahora espero el lunes con más ansias de saber que pasa…..feliz día.
Excelente lectura