En la pasada UANLeer de este año tuve la oportunidad de saludar en uno de los pasillos a Jesús Garza Morua (1966, Monterrey). Acababa de salir de una sala, había presentado su reciente poemario: Diáspora, días de lluvia, octubre en París”. Le compré un ejemplar. Tomó un libro, me dedicó unas palabras y nos hicimos una foto. Hoy, con el cariño y respeto que le tengo al maestro, quisiera compartirles tres de sus poemas:
El primero corresponde al apartado “Libro primero”. Los poemas no tienen nombre, pero en cambio, están enumerados.
XIV
La luz led de la 124 es recuerdo
corazón y memoria.
En medio de la nada, muy muy a lo
lejos
el zumbido del colibrí
tu voz en un grito viniéndote lento.
Sí, ahora son solo recuerdos,
crecen siempre
aún en la distancia
no dejan de ser,
llegan por todos lados:
en noches grises,
en cielos iluminados,
de sombra a sombra y
de sol a sol.
Pero, son solo putos recuerdos.
XXI
La tarde, el horizonte,
el poema se enciende,
llena de luz en nocturno hueco
con cansado silencios.
Luego viene el milagro
de la malta y marihuana,
tragos y fumadas al aire,
los versos del tiempo y recuerdos,
tinta negra manchando papeles.
Trazando poemas
y saber que no ha muerto
ni el amor ni el poema,
Aunque la sangre caiga
gota por gota
como llave de cocina.
Ha terminado el invierno,
es claro este disparo de primavera
de mirada imperturbable.
Y el último de esta breve selección es el XXII, correspondiente al apartado “Libro tercero”:
XXII
Aquí, no pasa nada
solo son palabras dichas a la pared,
tormentas en un vaso de agua,
aquí no hay nada.
Aquí el amor queda suspendido
sobre frágiles Hilos de seda hechos nudo
y un corazón destrozado,
mordisqueando por antropófagos en ayuno.
Aquí, dejé mi sueño y reposando
y las estrellas de tus ojos remojándose
a baño maría para mantenerlas tibia siempre.
Hoy, aquí solo quedó tu sonrisa
perdiéndose en el silencio….
Es verdad, es una pena que no pueda transmitir por este medio la fuerza e intensidad con que lee en voz alta sus poemas el “Güero Garza”, como también llaman al maestro. Pero confío en que los tres textos aquí escritos despierten su interés por conocer su obra. Los invito a adquirir y leer este “viaje” llamado Diáspora, no se arrepentirán. Los interesados pueden mandar un mensaje a las siguientes ligas:
Benito Rosales Barrientos nació en Monterrey, ha participado en talleres literarios de su ciudad natal. Es autor de los libros: Sobre la cornisa del laberinto, poemas; Cuando estos cielos caigan como ojos de gato, poemas; Las flores del jardín, cuento, 2017; La niña y la serpiente, cuento, Metimos la pata, entre otros.
