Collage de Aracely Sánchez Ruiz
Yo opino/ la columna de Aracely
¿Qué harías si fueras millonario?
Por Aracely Sánchez Ruiz
¿A quién con dos dedos de frente se le ocurre comprar un Melate y guardarlo en la visera de su auto? ¿O ponerlo en un alhajero y dejarlo al alcance de “la hermanastra de Cenicienta”? Solo a las protagonistas de Golpe de suerte, la telenovela que se estrenó en Las Estrellas el 16 de octubre y que sustituye a Vencer la culpa.
La nueva producción de Nicandro Díaz es una adaptación de Si yo fuera rico, una historia escrita por el chileno Rodrigo Cuevas (que nada tiene que ver con el hijo de Aída) en 2018, que sigue a tres familias que han puesto todas sus ilusiones (coincidentemente) en la misma combinación de seis números en un juego de azar. Y cuando “le pegan al gordo” no falta el buitre que quiera adueñarse del premio de 600 millones de pesos por cualquier medio, estafando a los ganadores.
La primera familia la forman Ignacio Pérez (Eduardo Yáñez) y Guadalupe Flores (Mayrín Villanueva). Nacho es empleado de una ferretería, con un patrón que lo explota y humilla. Es inmaduro, pero ama a su familia y es fan “de hueso colorado” de los Teporingos Neza, que nomás no dan una en la liga de futbol local.
Hace tiempo que juega los mismos números en el Melate (9, 11, 12, 15, 17 y 23), soñando con ganarse el premio mayor (¿en qué novela he oído eso?) y cuando al fin le atina le da por ir tras otro sueño: comprar su equipo favorito, llevarlo a la primera división y, por qué no, alcanzar el nivel de un Real Madrid. Pero esto solo le traerá problemas con Lupita, quien le exige que decida: su matrimonio o los Teporingos.
Por su parte, Miranda Ortiz (Eva Cedeño) vive en una elegante casona de un barrio residencial, pero solo gracias a la generosidad de su buen amigo César (Ricardo Silva), porque en realidad no tiene un peso, ni empleo y le debe varias rentas acumuladas, que este no le cobra; y también adeuda las colegiaturas del hijo. Cuando se dirige a una entrevista de trabajo tropieza “casualmente” con Tadeo (Gonzalo García Vivanco), quien roba las llaves de su coche y lo vende. Pero antes de entregarlo se encuentra en la visera el boleto de Melate, que al final del primer capítulo resulta premiado.
El guapo (no hay por qué negarlo) ladronzuelo no puede creer su suerte de haber ganado dos millones de pesos sin comprar boleto y se lo confiesa a su novia Roxana (Michelle Rodríguez), quien le aconseja quedárselo y no compartirlo, mucho menos regresarlo, a su legítima dueña.
Pero Tadeo tiene una molesta vocecilla que le habla al oído como si fuera su conciencia, la pequeña pero tremenda Lucy (Camille Mina), quien le advierte que el karma es canijo y que si no devuelve el carro y el boleto a Miranda le va a ir muuuy mal.
Al otro lado de la ciudad, Brenda (Daniela Martínez) y Tony (Diego Escalona) viven en la casa que les dejaron sus padres, de la que se han apropiado su malvada madrastra Constanza (Maya Mishalska) y su perversa hermanastra Sabrina (Elaine Haro). Son los terceros ganadores del Melate, pero no pueden cobrar el premio porque son menores de edad y tienen solamente 60 días para conseguir que un adulto lo reclame para ellos, por lo que la jovencita se ve obligada a buscar a su tío Adrián (Pietro Vannucci), a quien culpa del accidente en el que murió su padre, ya que manejaba borracho.
Lo que no sabe Brenda es que Sabrina hurtó la caja donde guarda el boleto ganador y las joyas de su madre y no se lo devolverá aunque se le hinque.
El hilo conductor de la historia es Dante Ferrer (Sergio Sendel), un ambicioso asesor financiero que se empeña en ofrecer sus servicios (y no gratuitamente, por supuesto) a los tres ganadores, con las negras intenciones de quedarse con los 600 “melones”.
Cabe destacar la inexperiencia de Yáñez en la comedia, ya que se me hace falso cuando llora, ¿así será la dirección? Habrá que preguntarle a Alejandro Gamboa.
El mismo problema de Constantino García, quien encarna a Diego, el hijo de Miranda, ¡qué mal actúa ese niño! Yo opino. No posee la gracia natural que muestra su compañerita Camille en el papel de Lucy, a quien Tadeo llama cariñosamente Pulga.
Y los hermanitos ingenuos Brenda y Tony, que creen que sus papás son brujos ¿o qué? Les piden que “usen su magia para que nos podamos ganar el Melate”, pero les funcionó.
¿Logrará Nacho hacer que su club se compare con el equipo merengue? ¿Recuperará Brenda su boleto ganador? ¿Devolverá Tadeo el premio que ya cobró a Miranda? ¿Aprenderá a actuar Constantino? ¿Dirigirán mejor a Yáñez?
Todas estas incógnitas se despejarán si sigues viendo Golpe de suerte, de lunes a viernes a las 20:30 horas, por Las Estrellas.
Aracely Sánchez Ruiz es licenciada en relaciones industriales egresada del Instituto Tecnológico de Chihuahua, trabajó 18 años en El Heraldo de Chihuahua, donde inició como correctora y los últimos doce años como reportera de la sección de espectáculos y cultura. Actualmente escribe notas y comentarios en Facebook.