7. Familia… parte 1. Almudena Cosgaya

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Dintel de Almudena

  1. Familia… parte 1

 

 

Por Almudena Cosgaya

 

 

—¿Quién eres? —preguntó Paola, con miedo en la voz.

Cuando la figura surgió de las sombras, Paola se encontró con una bella mujer de sonrisa dulce. Sin embargo, a pesar de la serenidad que transmitía su rostro, Paola no pudo evitar sentir un escalofrío recorriéndole la espalda. ¿Quién era esta misteriosa mujer y qué tenía que ver con la sombra que la había acosado en el sótano?

El misterio rodeaba aquel lugar, y Paola sabía que aún tenía mucho por descubrir. ¿Qué secretos se escondían tras las paredes de la antigua casa de sus abuelos? ¿Quién era aquella misteriosa mujer y por qué había aparecido justo en el momento en que la sombra la amenazaba?

—Por tu rostro puedo ver que las dudas te atormentan; no podría ser de otra manera —dijo la mujer acercándose a Paola, quien pudo ver su hermoso cabello castaño oscuro con algunos destellos rubios. Su piel parecía resplandecer con una luz propia, y sus ojos, de un color miel oscuro, parecían mirar directamente al alma de Paola.

—¿Quién eres? —preguntó nuevamente Paola, aún atemorizada.

—Responderé tu pregunta, pero antes déjame sacarte de este lúgubre lugar y curar tus heridas —dijo la mujer con una sonrisa enigmática.

De repente, un acto de magia hizo que el cuerpo de Paola levitara y la mujer la sacó del sótano. La luz de la nueva habitación hizo que Paola cerrara los ojos, pero al abrirlos se encontró con una bella sala que no tenía indicios de haber estado abandonada. Era como si el tiempo se hubiera detenido en aquel lugar y la misteriosa mujer fuera la encargada de mantenerlo así.

—Bienvenida a mi hogar —dijo la mujer.

—¿Tu hogar? —dijo Paola con incredulidad mientras era dejada sobre un cómodo sofá—. Esta es la casa de mis abuelos.

—Lo era. Todavía puedo escuchar sus voces y sentir su presencia en cada rincón de la casa. Aunque hace mucho tiempo que abandonaron este plano, su espíritu sigue vagando entre las sombras y los recuerdos de antaño.

—Aún no has respondido mi pregunta —dijo Paola, mientras sentía cómo un extraño artefacto, conjurado por los movimientos mágicos de la mujer, comenzaba a sanar sus heridas.

—Soy una bruja, y he estado esperándote durante mucho tiempo —respondió muy seria—. ¿Estás preparada para descubrir la verdad sobre tu origen y el de nuestra familia ancestral? La verdad puede ser aterradora, pero también puede ser la llave que abra puertas que nunca imaginaste.

Mientras hablaba, la luz de la habitación parecía oscurecerse; un aura sobrenatural rodeaba a la mujer. Paola sintió un escalofrío. Había algo en la voz y en la presencia de esta mujer que despertaba en ella un miedo profundo, pero, al mismo tiempo, una fuerte atracción hacia la verdad.

—Estoy preparada —respondió Paola con un hilo de voz, mientras la bruja tomaba su mano y la llevaba hacia un antiguo libro de hechizos que descansaba sobre una mesa de cristal.

—Entonces, permíteme mostrarte la verdad. Mira lo que está escrito en las estrellas, lo que está escrito en las runas, lo que está escrito en el libro de la vida.

La bruja abrió el libro, y de sus páginas brotaron unas luces mágicas que envolvieron a Paola, transportándola a un lugar desconocido, un lugar donde la realidad y la fantasía se unen para revelar el verdadero destino de su familia.

Paola estaba desconcertada. ¿La magia existía realmente? Un suave dolor en su cuello la hizo tocar su herida, pero fue detenida por su tía, quien la miraba con una expresión de preocupación, intensificándose. La bruja parecía excitada ante la visión de la herida en el cuello de Paola, como si estuviera descubriendo algo importante y significativo.

—¿Cuánto hace que te mordieron? —preguntó la mujer con preocupación mientras escudriñaba la herida en el cuello de Paola.

—Hace unas noches —respondió Paola con un hilo de voz.

—¿Qué has dicho? —preguntó la bruja con un tono ominoso—. ¿Qué te mordieron hace unas noches?

Su sorpresa se convirtió en una mueca de desagrado.

—No hay mucho tiempo. Escucha, Paola —dijo con un susurro que hizo que los pelos de la nuca Paola se erizaran—. Mi nombre es Paulina, y soy la hermana gemela de tu madre.

Ante la sorprendente revelación, los pensamientos de Paola se agitan en un remolino de emociones. La ira florece en su interior al imaginar que su tía podría haber estado cerca, observándola, desde que sus queridos padres fallecieron. ¿Por qué no había llegado antes y le había revelado toda la verdad sobre su familia y su destino? ¿Por qué había esperado hasta ahora para revelar su existencia? La frustración y la tristeza la abruman. Paola no puede evitar sentirse traicionada.

—¿Por qué me lo estás diciendo ahora? —preguntó Paola con frustración y tristeza en su voz—. ¿Por qué no antes? Mi vida podría haber sido diferente si hubieras estado aquí.

—Lo siento, pequeña —respondió Paulina con un susurro suave—. La magia tiene sus propias reglas y no siempre podemos elegir cuándo y cómo entrar en la vida de alguien. Pero ahora que estoy aquí, estoy decidida a ayudarte, a descubrir tu verdadero destino y a protegerte de cualquier amenaza, ya sea de este mundo o de otros.

De repente, un destello brillante captó la atención de Paulina. Era un dije en forma de copo de nieve que colgaba del cuello de Paola. Al observarlo con detenimiento, Paulina se dio cuenta de que era idéntico a uno que solía llevar su hermana perdida.

—¿Quién te entregó ese dije? —preguntó con un tono misterioso.

—Una misteriosa mujer con ojos verdes y cabello rubio —respondió Paola con un susurro, como si estuviera hablando consigo misma.

—Esa mujer es mi hermana mayor —declaró Paulina en tono sombrío—. Y lo que tengo que decirte sobre ella es algo perturbador. Es una guardiana entre mundos y realidades, y ha estado esperando el momento adecuado para entregarte ese dije. Tienes que estar preparada, porque a partir de ahora, tu vida nunca volverá a ser la misma.

 

Continuará.

 

 

 

 

Almudena Cosgaya descubrió su gusto por las historias desde niña; hacía fanfics de relatos ajenos, lo cual fue para ella un excelente entrenamiento para escribir luego sus propios cuentos, al darse cuenta de que en algunos de sus relatos de fanfic había creado un personaje que merecía su propia historia. Es autora de poemas y de prosa narrativa. En 2017 publicó su novela La maldición del séptimo invierno.

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