El trabajo gratis. Edgar Trevizo

El trabajo gratis

 

 

Por Edgar Trevizo

 

 

Hace muy poco hice un coraje porque una universidad me invitó a ser jurado de un concurso literario y a dar una conferencia a cambio de un «reconocimiento». Otro más: hoy me llamaron del Congreso del Estado de Chihuahua para ser jurado en la categoría que más propuestas recibe de la Medalla Víctor Hugo Rascón Banda (y, por tanto, la que más trabajo requiere). Me preguntaron si me interesaba y yo contesté que eso dependía de si había honorarios. Inmediatamente contestaron que no. Inmediatamente contesté: entonces no me interesa, gracias.

Me quedé pensando: Quienes organizan esto nunca pagan honorarios para los jurados porque los jurados siempre aceptan hacerlo gratis. Y deberíamos, todos y todas quienes estamos en posición de hacer esa clase de trabajos, decir que no si no hay honorarios. Y decir que no también si esos pagos están por debajo del monto justo, o si se van a tomar cuatro meses en emitirse.

Evidentemente, instituciones como esas tienen recursos para asignar honorarios. Simplemente no lo hacen porque, o no les da la gana, o todos les prestan sus servicios gratis sin chistar.

Si la mayoría sigue regalando su trabajo, jamás van a cambiar ese sistema insultante de requerir nuestros servicios y ni siquiera considerar en sus planeaciones financieras lo que le corresponde a cualquier trabajo como natural remuneración.

Vamos diciendo que no, por favor. Esto es para beneficio de todos.

 

 

 

Edgar Trevizo estudió letras españolas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Chihuahua. Es Premio Chihuahua de Literatura. Coordina un taller literario desde hace varios años. Fue editor y jefe del Departamento Editorial de la Secretaría de Cultura de Chihuahua. Ha publicado varios libros, entre ellos Blind Sugar y el libro colectivo Wikaráame. Poesía del mundo y sus alrededores, del cual es compilador. Actualmente es director de la Editorial Medusa.