Foto Pedro Chacón
Yo puedo quererte cuando quieras ser querida, cuando me quieras cerca
Por Sergio Torres
Yo puedo quererte cuando quieras ser querida, cuando me quieras cerca, cuando me quieras junto, cuando me quieras dentro. Puedo quererte de día y noche, cuando estoy solo o cuando estoy acompañado, con mis alumnos, con mis amigos, con mis pensamientos y la música que intento atrapar desde el aire.
Tal vez podría quererte aunque te vea besando a otro, sabiendo que le entregas el tiempo y la piel a otros amores, ¿quién soy yo para gobernar tu corazón? ¿cómo podría limitar tu apetito si no lo satisfago del todo? mi sentido del humor no alcanza, ni mi forma de ver la vida, ni siquiera mi tiempo para estar contigo.
Pero que yo te quiera no significa que me correspondas; tal vez me regales un par de encuentros en los que el cine, la comida o la cama sean escenario de pláticas y acercamiento a la intimidad de tu pensamiento, tu sonrisa, tu mirada y tu piel; tal vez solo te rías y mantengas la distancia apropiada para nuestra relación, si somos todo o si somos nada; tal vez todas y ninguna.
Lo que sí es imposible es que compartamos el tiempo, la comida y la cama si no quieres estar conmigo, si te quedas como consuelo de no poder estar con esas otras maravillosas personas que te estimulan la felicidad del alma y el cuerpo. Que yo te quiera no importa, no me elegirías si yo fuera la única opción y eso dice bastante del tipo de relación que tenemos: tú y yo estamos para lo que tu voluntad quiera, para cuando tu tiempo nos encuentre juntos. Ya estuve ahí y no tengo ganas de volver.
Que el amor, mucho amor, nos salve.