Sentimos y las palabras van definiendo
Por Sergio Torres
Sentimos y las palabras van definiendo nuestro mundo, el interior y el exterior. Aunque sabemos que hay sensaciones que no podemos expresar, como la comezón cosquillosa de querer ver a alguien a quien plantarle besos y verlos florecer en sonrisas; la sensación agridulce de ver a los amigos de la secundaria, ahora viejos, pero siempre niños de 12 años, con quienes jugamos básquet, fut, carreras, con quienes nadamos y bailamos y viajamos; o la sensación de acurrucarte en un abrazo almizclado de electricidad latente. Las palabras no bastan. No hay transliteration para los suspiros, los gruñidos, los sonidos de aprobación o disgusto que emitimos. No hay definición «culta» para un áyale, éitale, anda lurio, se ajuareó, ‘tás que te caes de buena, plebe, parece que te hicieron con manteca de cochi, que un silbido y una mirada pueden expresar sin espacio a otras interpretaciones. En esto nos faltan palabras. Hasta para la complicidad de dar un beso, abrazarnos, amarnos.
Sergio Torres. Licenciado en Artes, músico desde la infancia, dibujante y compositor de canciones. Maestro de música por vocación.