No soy una mujer barbuda. Leticia Herrera

No soy una mujer barbuda

 

 

Por Leticia Herrera

 

 

no soy una mujer barbuda pero

natura me proveyó de vellos protectores

que con precisa terquedad sonsaco de mi piel

para ir por el mundo entre los otros

 

a los señores les preocupan esas cosas

los pelos   las barbas   los bigotes

(prohibido el vello en las mujeres)

mientras con gesto doctoral

registran los centímetros de cadera

y que los senos rebasen el cuenco de sus manos

 

y allá va una de idiota a depilarse   a

cincelarse las cejas   a pelear toda la vida

con los vellos   pero aparte concilar

con los dones de hetaira prudente y sumisa

las heredades con hilo y aguja

y estrambóticas modas pasajeras

de jaez culinario y hogareño

 

sin me resisto o no dirán que es cosa mía

pero a qué mujer en sus edades le acontecerían

el gozo y la lujuria si no

claudica con elegancia a la erradicación

de la pelambre?

 

mientras descifro mis angustias

rutinariamente me avengo   y según

los cánones de cultura me depilo

las cejas las barbas los bigotes

las piernas y de una vez las lágrimas

achaques y risas explosivas

que tampoco son populares

 

oh dios cuánta exigencia

 

 

 

 

Leticia Herrera poeta, promotora cultural, editora, maestra universitaria, ha publicado una selva de libros, entre ellos: Pago por ver (1984), Canto del águila (1985), Poemas para llorar (1993), Caracol de tierra (1996), Vivir es imposible (2000), Hace falta que llueva (2002), Poemas incompletos 1984 – 2006 (2006), Solo digan que fui (2011), Celebración del vértigo (2011), Palabras roncas (2016) y Poemas escogidos (2019). La Universidad Autónoma de Nuevo León le entregó el Premio de las Artes 2011. Es directora de Ediciones Caletita.

Deja un comentario